SpanishPortugueseEnglishFrenchChinese (Simplified)RussianPersianArabic
30/08/23
31/08/1967 Tania, la guerrillera
Por Fernando Bossi Rojas

En 1964 llegaba a Bolivia una mujer especialista en etnología, antropología y folclore latinoamericano. Su  nombre era Laura Gutiérrez Bauer, una mujer de 37 años, físicamente atractiva, simpática, culta, deportista y hábil en la ejecución del acordeón y la guitarra.

La alta sociedad boliviana quedó impactada con su personalidad y carisma. Una clase social pacata, colonizada y fácil de encandilar con todo lo proveniente del mundo europeo o norteamericano, fácilmente cayó encandilada bajo los encantos de esta dama que hablaba cuatro idiomas y no precisamente el quechua, aimara o guaraní.

Es así como Laura logra incrustarse en lo más profundo de la elite social y política boliviana, llegando a conectarse directamente con el presidente René  Barrientos Ortuño, con otros altos funcionarios del gobierno, con la cúpula de las Fuerzas Armadas y con la crema de la sociedad.

¡Qué sorpresa habrían de llevarse esos oligarcas cuando al enterarse de que convivieron y le abrieron las puertas de sus casas a una espía comunista, nada más ni nada menos que subalterna del guerrillero Ernesto Che Guevara!

El nombre verdadero de Laura era Haydée Tamara Bunke Bider, quien  había nacido en Buenos Aires en noviembre de 1937. Su padre era alemán y su madre polaca, ambos comunistas, que habían huido de Alemania con la irrupción del nazismo. Al culminar la guerra, cuando Haydée Tamara tenía 12 años la familia se trasladó a Alemania Oriental. Allí siguió su formación, incorporándose a la militancia comunista.

En 1960, cuando se preparaba para regresar a Argentina, Haydée Tamara conoció al Che Guevara y a la bailarina Alicia Alonso en una gira que estaban haciendo por Alemania Oriental. En las conversaciones que mantuvieron con el Che y Alonso, acordaron invitarla a visitar Cuba para conocer la experiencia revolucionaria.

Durante su estadía en Cuba trabajó y estudió incansablemente, incorporándose a los cuadros dedicados a la inteligencia y contrainteligencia. Con el Che Guevara entablaron una sólida relación política, por lo cual fue encomendada por el también argentino a realizar esos trabajos de espionaje en Bolivia como agente “dormido”.

El trabajo en Bolivia de Tania, nombre que adoptó en la guerrilla, fue impecable, salvo un error que se cometió, dejándola expuesta cuando trasladaba a algunos guerrilleros. Al haber sido descubierta, se incorporó directamente a la lucha armada en la guerrilla comandada por el Che. Concretamente, fue designada para integrar el grupo de retaguardia al mando del guerrillero cubano Juan Vitalio Acuña Nuñez, Joaquín.

La historia posterior es muy conocida, la columna de Joaquín se desconectó de la columna principal y quedó aislada. El 31 de agosto de 1967, por la delación de un campesino, los guerrilleros de Joaquín fueron ametrallados mientras cruzaban el río, en el Vado de Yeso. Todos murieron. El cuerpo de Tania fue encontrado recién 7 días después de la emboscada.

La joven revolucionaria murió en combate, poniendo el ejemplo de su firmeza en las convicciones: la lucha por el socialismo y la liberación nacional.

Fuente:
Portal Alba

TV / Vídeo / Radio

Búsqueda temática

Buscar